“Transporte Público Del Sur De Tamaulipas: Hecho Una Chatarra Y Con Aumento Del Pasaje En Puerta”.
Por Alberto Dávila.
El transporte público en el sur de Tamaulipas es un insulto a la ciudadanía. Las unidades que recorren las calles de Tampico, Madero y Altamira son verdaderas chatarras con ruedas: desvencijadas, sucias, sin mantenimiento y peligrosas. Aun así, los concesionarios y autoridades ya preparan el terreno para un nuevo aumento al pasaje, como si los usuarios viajaran en un servicio de primera.
Cada día miles de personas suben a camiones que deberían estar en el deshuesadero. Algunos sin frenos en buen estado, con puertas que no cierran, asientos rotos y motores que arrojan humo negro. Son una amenaza rodante para pasajeros, peatones y otros automovilistas. Y para colmo, los operadores, lejos de brindar un servicio digno, tratan con prepotencia a los usuarios, manejan con imprudencia y muestran una total falta de respeto.
¿Dónde están las autoridades del transporte? ¿Por qué permiten que estas unidades sigan circulando? La Dirección de Transporte Público y las delegaciones locales han sido omisas, complacientes y, en muchos casos, cómplices de un sistema podrido que sólo beneficia a unos cuantos concesionarios.
Hablar de aumentar el pasaje en estas condiciones es una burla. No hay mejoras, no hay modernización, no hay respeto por el ciudadano. Los usuarios pagan por subirse a una lata vieja, sin aire acondicionado, con vidrios estrellados ó en su defecto sellados y un chofer que parece estar haciendo un favor.
El transporte público del sur de Tamaulipas refleja el abandono, la corrupción y la desfachatez con la que se gobierna. Mientras los funcionarios posan para la foto prometiendo modernidad y eficiencia, la realidad es que miles de personas se juegan la vida cada día en camiones que apenas se sostienen.
Si el aumento al pasaje se concreta sin exigir primero una renovación total del servicio, quedará claro que las autoridades han decidido darle la espalda, una vez más, a la gente trabajadora que depende del transporte para vivir.